Informe del Consejo escolar: La atención a las altas capacidades desde la Comunidad de Madrid
n los últimos meses ha habido dos publicaciones de gran relevancia para la atención a las altas capacidades en la Comunidad de Madrid (CAM, a partir de ahora):
1.- El Informe 2022 del Consejo escolar, relativo al curso 20/21, que analizamos aquí.
2.- El decreto por el que se regula la atención educativa a las diferencias individuales del alumnado, que abordaremos en una próxima entrada.
El Informe del Consejo escolar nos permite apreciar:
Dos apuestas claras:
1.- La creación del Equipo de orientación educativa y psicopedagógica específico de altas capacidades. En el informe consta su creación. Habrá que esperar los datos de los próximos años para poder valorar su impacto, en concreto el incremento de la detección y de la flexibilización, así como la implantación de enriquecimientos y ampliaciones reales. Como indica una de las propuestas de mejora, esperemos que la inversión en ellos acabe “permitiendo que los alumnos reciban una atención más pronta y continua”
2.- La confianza en dos fundaciones para los programas centrales. Esto es, Pryconsa para la diferenciación curricular; Max Mazin para el PEAC. El primero es resultado de un esfuerzo largo y global, y que quiere poner a disposición materiales aptos para su uso en el aula con este alumnado, canalizar la formación del profesorado y ampliar la detección; el segundo lleva tiempo en funcionamiento y sigue ampliando su oferta.
Dos datos preocupantes:
1.- La detección. El dato global del 0,29% queda muy lejos de los umbrales mínimos del 2%. Preocupa, sobre todo, la baja detección en Infantil (sólo 6 casos); toda la literatura sobre altas capacidades recomienda la detección temprana. Tampoco hallamos una valoración sobre detección en colectivos desfavorecidos. Es dudoso que sin una fuerte inversión en la detección se pueda aspirar a que la atención a las altas capacidades sea una realidad.
2.- Las escasas flexibilizaciones. Comprobada su utilidad (https://www.visiblelearningmetax.com/influences/view/acceleration_programs), sigue habiendo mucha oposición, más que a su concesión, a su solicitud.
Dos hechos positivos (no nombrados):
1.- La incorporación de Programas del Bachillerato Internacional en centros públicos. Es una tendencia constante (https://www.comunidad.madrid/noticias/2020/01/24/ampliamos-oferta-bachillerato-internacional-cuatro-nuevos-centros), y muy provechosa para el alumnado de altas capacidades, en la CAM. Se analizan en el Informe infinidad de datos sobre Bachillerato, mas no la influencia de estos programas y su extensión. Se ha empezado a instaurar también el programa correspondiente a la ESO, el Diploma de Años Intermedios.
2.- La apertura al diálogo. Nosotros, como pequeña realidad, hemos de reconocer que diversas instancias (DATs, Ordenación académica, Atención a la Diversidad, grupo político, Pryconsa) se han mostrado acogedoras.
Dos ausencias:
1.- Representantes de la movilización en torno a las AACC. Sorprende la ausencia total de propuestas de mejora relativas a este alumnado. La inmensa movilización (particulares, profesionales, asociaciones) que se percibe en las redes, ¿tiene algún eco, alguna vía de contraste, con la política educativa madrileña?
2.- Iniciativas globales y arriesgadas. Dar un paso más, aún no dado, supondría acoger proyectos educativos que no sólo ofrecieran ampliaciones, enriquecimiento, talleres o programas extraescolares, sino una profunda reestructuración organizativa y curricular. Las experiencias pioneras (el marco del desarrollo del talento de EE.UU., por ejemplo; o los modelos de Renzulli) muestran el real cambio que ello supone.